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Gerard Moreno (i) celebra un gol.
Charles desmonta la exhibición de Gerard Moreno y empata en el 89
jornada 2

Charles desmonta la exhibición de Gerard Moreno y empata en el 89

Los catalanes desaprovecharon una renta de dos goles ante los andaluces

efe

Viernes, 26 de agosto 2016, 09:29

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El Espanyol espera ofrecer una victoria a su afición, hoy a las 22.00 horas contra el Málaga en Cornellà-El Prat, después del varapalo que sufrió en su estreno liguero en el Sánchez Pizjuán (6-4), un resultado que evidenció las carencias del equipo en defensa.

El cuerpo técnico ha avanzado que no planea realizar muchos cambios en el equipo respecto al Sevilla. El vestuario, por su parte está muy motivado para demostrar ante los suyos las buenas sensaciones que despertó en pretemporada. El anfitrión no saltará al césped con especulaciones.

La efectividad de cara a puerta del Espanyol ha quedado sobradamente demostrada, tanto en los encuentros de preparación como por los cuatro tantos que consiguió en la primera jornada. Todos los focos están puestos ahora en el rendimiento defensivo. Los preparadores han trabajado durante la semana para corregir errores.

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En la convocatoria son baja el lateral izquierdo Rubén Duarte, el central francés Michael Ciani y el centrocampista Salva Sevilla. Todos ellos se han quedado fuera por decisión exclusivamente técnica. Por otra parte, son novedades el central argentino Demichelis y el extremo Jurado.

El entrenador blanquiazul, Quique Sánchez Flores, no ha dirigido al equipo esta mañana en la Ciudad Deportiva debido, según ha informado el club, a un proceso febril de origen vírico. El segundo técnico, Alberto Giráldez, ha sido el encargado de comparecer en la rueda de prensa. La presencia de Quique en el partido de mañana no está garantizada.

El Málaga de Juande Ramos, que tuvo un breve paso por el Espanyol en la liga 2002-03, pues fue destituido tras las cinco primeras jornadas con el equipo de colista, viaja a Barcelona con ambición y con el reto de superar el palo que le supuso el 1-1 frente a Osasuna en la primera jornada, cuando los malaguistas ya creían tener amarrada la primera victoria.

La obsesión de los malaguistas es mejorar el juego y las prestaciones frente a un rival reforzado y que anotó cuatro goles en el estreno del campeonato frente al Sevilla, si bien acabó perdiendo 6-4 por su fragilidad defensiva.

El Málaga no gana en Cornellá desde 2012, cuando venció por 1-2 con el técnico chileno Manuel Pellegrini y con goles del argentino Martín Demichelis, ahora espanyolista, y del delantero holandés Ruud Van Nistelrooy, y desde entonces ha acumulado tres empates y una derrota, la de la pasada temporada por 2-0.

Los malagueños quieren borrar la mala imagen ofrecida frente al equipo pamplonés y no se fía del conjunto entrenado por Quique Sánchez Flores, que, pese a caer por 6-4, demostró tener gol en el Ramón Sánchez Pizjuán.

Juande no podrá contar con el defensa brasileño Weligton Robson Pena de Oliveira, lesionado, aunque sí estará el medio Ignacio Camacho, quien podría jugar su último partido como blanquiazul si finalmente el Mónaco, que está interesado en el maño, lo ficha.

El técnico manchego ha convocado a dieciocho jugadores, entre los que la principal novedad con respecto a los diecinueve citados en el debut liguero es el joven delantero marroquí Youseff En-Nesyri, en detrimento del portugués Duda y del lesionado Weligton.

Alineaciones probables:

Espanyol: Roberto; Javi López, Álvaro, Óscar Duarte, Aarón; Hernán Pérez, Víctor Sánchez, Diop, Piatti; Gerard Moreno y Baptistao.

Málaga: Kameni; Rosales, Llorente, Koné, Ricca; Keko, Camacho, Recio, Jony; Juanpi y Sandro.

Árbitro: Gil Manzano (comité extremeño).

Cornellà-El Prat. 22.00 horas.

Era el debut en casa de la era Chen Yansheng para el Espanyol, una fiesta con un guión idílico gracias a un doblete de Gerard Moreno ante un Málaga débil atrás hasta el minuto 60, aunque después reaccionó a lo grande y lo culminó con un empate 'in extremis' de Charles en el minuto 89.

El partido arrancó con alternativas para ambos conjuntos. Sin embargo, las más claras fueron para el Espanyol. Mientras el Málaga firmaba un desviado tiro de Sandro y un centro sin destinatario de de Jony, el anfitrión se aferraba a las carreras de Piatti y a las ganas de Gerard Moreno de estrenar su casillero en casa.

El catalán, solo en el área de Kameni, ex blanquiazul, no pudo culminar una buena jugada colectiva cuando todo parecía hecho, aunque erró la mejor oportunidad hasta entonces de los suyos. Tras el aviso, los de Juande respondieron a la contra. No tuvieron éxito, aunque sus revoluciones eran mayores.

Pero Moreno tenía cuentas pendientes y eso marcó el choque. En el minuto 27, el ariete aprovechó la autopista que dejó la defensa del Málaga, recortó ante Llorente y batió al portero camerunés, por la derecha y a media altura. El balón varió ligeramente su trayectoria al impactar en el contrario.

A partir de entonces, la presencia arriba del Espanyol se fue reduciendo. Amenazaba con las incursiones de Piatti, que se ha adaptado a la perfección al bloque, pero el cuadro visitante era cada vez más protagonista. Juanpi tuvo la mejor opción de empatar, pero su disparo fue demasiado elevado.

En la reanudación, el Málaga salió con más velocidad y fluidez en ataque. Sandro y Jony estaban más tiempo bajo los focos. Recio, que cumplió cien partidos en Primera, también tuvo protagonismo con un libre directo. Sin embargo, los andaluces seguían lamentando sus desajustes en tareas de contención, con espacios y facilidades.

Juande Ramos sentó a Recio y dio entrada a Charles. El brasileño elevaba la apuesta ofensiva. De todos modos, era la noche de Gerard Moreno. El barcelonés firmó el segundo en Cornellà en el minuto 61, tras rematar de cabeza un centro desde la derecha de Piatti. Su celebración coincidió con la lesión de Baptistao: entró Caicedo.

El resultado no cambió el planteamiento blanquiazul, que insistía arriba. Hernán Pérez, de hecho, se quedó solo ante Kameni en una postura algo forzada para definir. Pese a todo, el guión se alteró en muy poco tiempo. Cinco minutos después de la diana de Gerard Moreno, Diego Llorente marcó de cabeza.

El defensa del Málaga conectó una falta lateral y aprovechó una mala salida de puños del meta Roberto. Había partido. El cuadro andaluz lo sabía y apretó al Espanyol como nunca, a falta de un cuarto de hora para el final. Juande agotó su último cambio para exhibir toda su artillería, En-Nesyri por Keko.

Quique Sánchez Flores no quería más sorpresas tras el 6-4 del debut en Sevilla. La zaga catalana se mostró sólida, pero la iniciativa era prácticamente monopolio del rival. La afición local suspiraba cuando Roberto despejó un latigazo de Sandro. Y se lamentó, a lo grande, cuando apareció Charles en el minuto 89.

Era el premio a la insistencia del Málaga. También el castigo a la tensión atrás del anfitrión, una de sus asignaturas pendientes más claras. El 2-2 fue un error claro. El delantero brasileño firmó el empate al escabullirse entre los centrales y, con disparo cruzado, dejó en nada la salida del portero. Mazazo y final.

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